Dirección: Joaquín Gutiérrez Acha.
Intérpretes: Narración a cargo de Estrella Morente.
Sinopsis
Película documental que nos muestra la vida a lo largo de todo el cauce del río Guadalquivir, el río grande según los antiguos pobladores árabes de la Península Ibérica.
A través del camino realizado por un digno representante de la fauna autóctona, un zorro, se recogen imágenes desde el nacimiento del río en la Sierra de Cazorla hasta su desembocadura en Sanlúcar de Barrameda. En ese trayecto el río transcurre por espacios naturales de enorme valor ecológico como son la citada Sierra de Cazorla, Sierra Morena o Doñana, donde antes de desembocar da lugar a las marismas del Guadalquivir, tan prolijas en vida como en color.
Estrella Morente le pone voz a cada uno de los pasos que da nuestro protagonista.
A través del camino realizado por un digno representante de la fauna autóctona, un zorro, se recogen imágenes desde el nacimiento del río en la Sierra de Cazorla hasta su desembocadura en Sanlúcar de Barrameda. En ese trayecto el río transcurre por espacios naturales de enorme valor ecológico como son la citada Sierra de Cazorla, Sierra Morena o Doñana, donde antes de desembocar da lugar a las marismas del Guadalquivir, tan prolijas en vida como en color.
Estrella Morente le pone voz a cada uno de los pasos que da nuestro protagonista.
Opinión
Desde CDI hemos querido abrir esta ventana a la naturaleza para inundar nuestro espacio de aire fresco, dejándola abierta a toda especie que nos quiera acompañar en esta pequeña, verde y húmeda vereda.
El río grande (traducción literal de la denominación que le dio el pueblo de Al-Andalus) ha moldeado uno de los parajes naturales más ricos de Europa, y esta película-documental trata de ponerlo en valor y de alertarnos a todos sobre su importancia.
A través de las distintas épocas del año y acompañando a un bello ejemplar de raposo ibérico (o varios) en su camino desde el nacimiento del río en las cumbres de Cazorla (Jaén) hasta los arenales de playa a pie de Océano Atlántico en los que se desemboca (entre las provincias de Huelva y Jaén), toda clase de animales salen a nuestro encuentro, poniendo de manifiesto la "fertilidad" del paraje natural y su trascendental valor ecológico. Durante esos casi 700 kilómetros de recorrido, se pone en valor, sobre todo, a las marismas del Guadalquivir (Doñana), un paraje natural que sirve de área de servicio y descanso para millones de aves que visitan la Península Ibérica, bien para quedarse o bien en su larga migración estacional.
En lo puramente cinematográfico hemos de destacar su innegable belleza visual y alabar su notable fotografía, exponiendo tanto lo hermoso de la vida natural como otros aspectos más crueles y agrios de la misma. No obstante, junto a esa finura destinada a nuestros ojos, un recargado texto, excesivo de lírica y de fáciles metáforas, castiga nuestros oídos. Demasiada ansia de grandilocuencia que a veces desemboca en la exageración. Sin duda se hubiese agradecido algo menos de "adobada pedantería". La narración de Estrella Morente, con todo nuestro respeto y sin ánimo de ofender a nadie, sólo opinamos, tampoco nos convence, si bien entendemos que se haya buscado a alguna celebridad de la tierra que sirviese de atractivo y reclamo adicional.
Estamos ante un precioso producto nacional que alabamos, tanto en la forma como en su contenido divulgativo/educativo. No así, en lo narrativo, donde se recarga y deriva hacia un sobrepeso lírico. En su género, y sin posibilidad de comparación alguna, merece aprobar.
Nota general: 5,5 sobre 10.
El río grande (traducción literal de la denominación que le dio el pueblo de Al-Andalus) ha moldeado uno de los parajes naturales más ricos de Europa, y esta película-documental trata de ponerlo en valor y de alertarnos a todos sobre su importancia.
A través de las distintas épocas del año y acompañando a un bello ejemplar de raposo ibérico (o varios) en su camino desde el nacimiento del río en las cumbres de Cazorla (Jaén) hasta los arenales de playa a pie de Océano Atlántico en los que se desemboca (entre las provincias de Huelva y Jaén), toda clase de animales salen a nuestro encuentro, poniendo de manifiesto la "fertilidad" del paraje natural y su trascendental valor ecológico. Durante esos casi 700 kilómetros de recorrido, se pone en valor, sobre todo, a las marismas del Guadalquivir (Doñana), un paraje natural que sirve de área de servicio y descanso para millones de aves que visitan la Península Ibérica, bien para quedarse o bien en su larga migración estacional.En lo puramente cinematográfico hemos de destacar su innegable belleza visual y alabar su notable fotografía, exponiendo tanto lo hermoso de la vida natural como otros aspectos más crueles y agrios de la misma. No obstante, junto a esa finura destinada a nuestros ojos, un recargado texto, excesivo de lírica y de fáciles metáforas, castiga nuestros oídos. Demasiada ansia de grandilocuencia que a veces desemboca en la exageración. Sin duda se hubiese agradecido algo menos de "adobada pedantería". La narración de Estrella Morente, con todo nuestro respeto y sin ánimo de ofender a nadie, sólo opinamos, tampoco nos convence, si bien entendemos que se haya buscado a alguna celebridad de la tierra que sirviese de atractivo y reclamo adicional.Estamos ante un precioso producto nacional que alabamos, tanto en la forma como en su contenido divulgativo/educativo. No así, en lo narrativo, donde se recarga y deriva hacia un sobrepeso lírico. En su género, y sin posibilidad de comparación alguna, merece aprobar.
Nota general: 5,5 sobre 10.
Tráiler
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